Simboliza el poder masculino formativo, atributo de los dioses del trueno y la forja, especialmente Hefesto, Vulcano y Thor. El martillo y el yunque juntos son las fuerzas formativas de la creación, tanto en el aspecto masculino activo como en el femenino pasivo. Un martillo que golpea y aplasta representa la justicia y la retribución. Para los chinos, el martillo significa la formación divina del universo, el poder supremo que ahuyenta la oscuridad y el mal.
Para los cristianos, el martillo es un símbolo del sufrimiento de Cristo. En la mitología egipcia es el emblema de Ptah. En la mitología grecorromana, el martillo simboliza el trueno, la venganza y es un atributo de Hefesto. Los japoneses tienen un martillo que simboliza riqueza y buena suerte. En la mitología nórdica y teutónica, el martillo de trueno de Thor, el destructor, cuando se lanza, siempre alcanza su objetivo y regresa a Thor; puede, además, resucitar a los muertos. Corresponde al vajra de Indra y al rayo de Júpiter.
Yunque simbolismo
Significa la forja del universo, el horno primordial, la tierra, la materia. El martillo y el yunque son dos fuerzas formativas en la naturaleza, una de las cuales es masculina, la otra femenina; uno es pasivo, el otro es activo; uno positivo, el otro negativo. Atributo de todas las deidades de la herrería, truenos y tormentas como Hefesto, Vulcano, Thor, etc. En el cristianismo, el yunque es el emblema de los santos Adrián y Eloi. A veces se muestra a Juno volando por el aire con yunques en los pies. En este caso, simboliza el elemento aire.
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