Birkat Cohanim, bendición sacerdotal o bendición de Aarón, es una antigua costumbre judía que se toma directamente del libro de los Números (Nm 6,22-27) pasaje en el que Dios da instrucciones a Moisés, relativas a Aarón y sus descendientes, de la manera que debían bendecir al pueblo de Israel.
«Que el Señor te bendiga, y te guarde; que haga resplandecer su rostro sobre ti, y te sea propicio; te muestre su rostro, y te conceda la paz» (Nm 6,24-26).
Así, la bendición es administrada por miembros de la clase sacerdotal judía, por lo general en los días festivos, y es acompañada por un gesto con las manos. En este gesto se extienden ambos brazos y con los dedos de las manos se forma una figura similar a la «V», en la forma de la letra hebrea Shin ש lo que simboliza la luz de la Shekinah o presencia de Dios.
Birkat Cohanim, bendición sacerdotal o bendición de Aarón, es una antigua costumbre judía que se toma directamente del libro de los Números (Nm 6,22-27) pasaje en el que Dios da instrucciones a Moisés, relativas a Aarón y sus descendientes, de la manera que debían bendecir al pueblo de Israel.
«Que el Señor te bendiga, y te guarde; que haga resplandecer su rostro sobre ti, y te sea propicio; te muestre su rostro, y te conceda la paz» (Nm 6,24-26).
Así, la bendición es administrada por miembros de la clase sacerdotal judía, por lo general en los días festivos, y es acompañada por un gesto con las manos. En este gesto se extienden ambos brazos y con los dedos de las manos se forma una figura similar a la «V», en la forma de la letra hebrea Shin ש lo que simboliza la luz de la Shekinah o presencia de Dios.
Letra hebrea Shin |
Birkat Cohanim consta de tres partes, es una triple bendición, simple y directa.
«(1) Que el Eterno os bendiga y os guarde. (2) Que el rostro del Eterno brille sobre ti y tenga misericordia de ti. (3) Que el rostro del Eterno descanse sobre vosotros y os dé la paz».
El número de palabras y el arreglo de las bendiciones tienen un significado especial en hebreo y están diseñados con crescendo o aumento gradual. Los comentaristas notan que las bendiciones se acumulan en efecto. El primero es para el bienestar material, el segundo para el bienestar espiritual y el tercero es una bendición, que incluye a ambos. Otros comentaristas sugieren que la tercera bendición le pide a Dios que nos preserve y nos bendiga, ya sea que lo merezcamos o no.
En tiempos antiguos, los sacerdotes probablemente despedían a la gente con estas palabras al final del servicio. La bendición no viene del sacerdote, que es impotente por sí mismo, sino de Dios, el sacerdote es solamente el canal para la bendición.
La última palabra de bendición es «Shalom», una palabra que describe un bienestar integral y holístico.
Durante los tiempos del Templo de Jerusalén, la bendición sacerdotal fue parte del culto diario. Parados en una plataforma especial, los sacerdotes levantaban sus manos para dar la bendición. En la tradición judía posterior, esta bendición pasó a formar parte de la liturgia de la sinagoga. En la liturgia ortodoxa es cantada por los descendientes de los sacerdotes, en la actual Israel, diariamente, en la diáspora únicamente en las fiestas. También es parte del ritual casero, donde tradicionalmente es hablado por el padre para bendecir a sus hijos en la víspera del sábado (Erev Shabat).
Spock, el saludo vulcano y su significado
Cuando era un niño, Leonard Nimoy, vio un signo que más tarde se convertiría en su sello característico en la serie Star Trek, él saludó vulcano de «larga vida y prosperidad». Se creía que este gesto de mano se basaba en la brújula y el compás.
Pero el saludo vulcano utilizado por el Sr. Spock tenía antecedentes sacerdotales. Leonard Nimoy, que interpretó a Spock en la serie épica Star Trek, compartió la historia detrás de su famosa seña. Aproximadamente a la edad de 8 años, Nimoy asistió a la sinagoga durante los Días Santos con sus padres (inmigrantes judíos de Ucrania). Mientras estaba allí vio la bendición llamada Birkat Cohanim, realizada por los descendientes sacerdotales de Aarón -los Kohens o Cohens-.
«Un grupo de hombres en esta sinagoga en particular, los Kohen, miembros de una tribu sacerdotal, se pusieron de pie frente a la congregación para bendecir a todos, recordó Nimoy. Eran muy ruidosos, en éxtasis, casi como en una reunión de avivamiento, y gritaban esta oración en hebreo: Que el Señor te bendiga y te guarde.., pero en ese momento no tenía ni idea de lo que estaban diciendo. Mi padre dijo: "No mires" y todos tenían la cabeza cubierta con sus mantones de oración o las manos sobre los ojos. Y veo a estos tipos con la cabeza cubierta con sus mantones, pero con las manos en alto. Era escalofriante, espeluznante y genial».
PERO ESTE ES TRADICIÓN CEREMONIAL NO UN MANDATO.
ResponderEliminarSisisi
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