A B R A C A D A B R
A B R A C A D A B
A B R A C A D A
A B R A C A D
A B R A C A
A B R A C
A B R A
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Se atestiguan varias etimologías de origen oriental o del Medio Oriente. Algunos esoteristas creen que ABRACADABRA representa una modificación del hechizo caldeo ab bada ke daabra "perecer con una palabra". Podria provenir de una transformación del arameo “adhadda kedhabhra” que significa “que la cosa sea destruida”, o evra kedebra que significa “crearé según mis palabras".
Otra variante de su interpretación fue la frase hebrea: Abreg as habra que significa “envía tu rayo hasta la muerte” o Ha brakha dabra “הברכה דברה”, que significa “la bendición ha hablado”. Que se usaba para deletrear y conjurar diversas enfermedades, y sobre todo fiebre.
En esta función, el médico romano Quintus Serenus utilizó por primera vez el ABRACADABRA en el siglo III. En su poema De Medicina Praecepta se prescribe que cualquier persona con hemitrita o fiebre demi-terciana use un amuleto o filacteria que contenga la palabra escrita como un cono invertido. Encontramos el rastro de esta fórmula en los relatos que relatan la fabricación de un Golem.
En los grimorios medievales, ABRACADABRA se consideraba una fórmula para invocar a los malos espíritus. Se creía que, con cada respiración, cuando se lanzaba este hechizo, un demonio salía volando del mundo infernal. ABRACADABRA también fue visto como la clave del pentagrama.
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